31 de octubre de 2006
1:04 p. m.

Del rock y la diferencia

Aléguele a Octav
Visitando el Parque de la Villa en Medellín (lugar que solía frecuentar) observo un fenómeno entre las personas de mi generación (o sea, los que recién marcan el dos o se acercan) las cuales tienen una visión de la vida desde un extraño mundo bidimensional de la sociedad de consumo, muy al estilo MTV guiado por dos parámentros, la música y la moda, y que siempre me ha parecido peculiar: todos se creen diferentes y todos se ven igualitos.

Si, así es, se creen diferentes lo defienden con absoluta convicción; curiosamente siguen un mismo patrón (que ironía, ¿no?). En cuanto a la música, el rock es el refugio de los "rechazados e incomprendidos" y el reggaetón el enemigo, lo que equivale a decir que es mejor ser igualito a un gringo o un inglés, que a un pobre colombiano o un puertorriqueño, lo cual en parte es cierto, pero esa actitud de "pinscher" resulta grotesca. Por otra parte, está la constante utilización de un prejuicio (que sobra decir: ES ALIMENTADO POR LOS MEDIOS) en cuanto a la belleza y la inteligencia. Se preocupan por verse diferentes, pero ¿Diferentes a qué?, son victimas de los mismos modelos y cambian con ellos sin saberlo, se preocupan demasiado en como va la moda solo por no parecerse a ella. De paso, logran un efecto adverso mostrándose como una partida completa de rebeldes sin causa, ignorantes y para colmo, cerrados mentalmente.

Para ser diferente, creo que lo primero que deberían hacer es dejar de preocuparse por aparentarlo, por saber como se ven los demás, que hacen o dejan de hacer, dejarlos ser felices y ser felices, cada quien construye su propia individualidad como lo crea más conveniente. Hay que abrir la mente para aprender, el resto, viene por añadidura.

7 Comments:

Me parece que todos son unos tontos al tratar de no parecerse a la masa y ser parte de una masa diferente, simplemente quieren ser parte de una masa menor, no ser individuos diferentes.
YO estoy completamente de acuerdo!
Es cierto, aunque de eso sólo se da cuanta uno cuando llega a ser adulto. Yo mismo fui de adolescente "diferente" y sin embargo era ugual a muchos. ¡¡Bendita sabiduría que dan los años!!

  At 10:58 p. m. Blogger Octav said:

pequeño demonio: Ah, que cosa fuera la masa sin candela. Masa a fin y al cabo, falta de identidad, o en la busqueda de ella.

madame_web: gracias!

nicolás: es cierto, desde ese punto de vista lograron ser diferentes , especialmente los metaleros, pudieron congelarse 20 años.

velvet: si, afortunadamente algunos ya superamos esa etapa (¿dije afortunadamente?). Los que logramos pasar de allí al menos aprendimos a quedarnos con lo bueno.

Que bien llegar y encontrar comentarios diferentes alos de nosotros mismos, gracias por el apoyo y todos son bienvenidos por acá.

  At 8:53 a. m. Blogger Octav said:

Framto: y todavía quedan muchos prejuicios de los cuales bajarse.

  At 1:29 p. m. Anonymous Anónimo said:

¿quien no quiere ser diferente? los humanos buscamos ese tipo de cosas: trascendencia, diferenciacion, cosas sublimes, y se buscan de muchas formas. Cuando yo era diferente siempre me vestia igual, hablaba con la misma gente, iba al mismo bar, leia los mismos libros. Ahora no me importa ser igual, o diferente, hago lo que me gusta sea de metalero, de nerdo, de alcoholico, de farandulero, de rapero o de imbecil. Bendita sabiduria dan los años, cierto, pero todos debemos pasar por un proceso. Lo importante es moverse en la vida, pasar por la vida, no quedarse estatico.

Miro los años "diferentes" de mi vida y me causa risa el nivel de estandarizacion que hay en las culturas urbanas. Sin embargo no me parece bien ni mal, cada loco con su cuento. Yo seguire con el mio.

  At 4:47 p. m. Blogger Octav said:

Daniel: nada que decir, esa es la actitud. Pero me complace hacer el papel del que le dice a los pequeños que el "niño dios" son los papás.